La ilusión es nuestra culpa. Vivir esperando que la propia vida será amable y agradecida contigo, por el simple hecho de serlo, es ser un estúpido o como dicen «vivir en la inopia». Nada viene regalado y nadie te dará un minuto de su tiempo sin un interés oculto, bueno probablemente esta gente que para mí son seres extraños y sobrenaturales, que van de voluntarios a los sitios y trabajan en ONGs, estarían encantados de regalarte un segundo pero están demasiado ocupados ayudando a los niños de Africa.
¿Somos nosotros mismos con nuestra actos egoístas quienes provocamos estas situaciones o el destino juega al libre albedrío decidiendo con quién será más cruel o afable?
Hemos de ser selectivos con que y quienes nos rodean, o por el contrario vivir en la soledad de tu única compañía (y la de tu perro, y si no tienes cómprate alguna que otra temporada completa de una serie). Llena tus días con nimiedades, haz las cosas mecánicamente, piensa poco y actúa mucho, metete en la cama con todas las tareas hechas pero no olvides pensar en las del día siguiente o el vacío inhumano volverá a comerse tus horas. Pero sobre todos aprende a conversar contigo mismo y entender tus propios pensamientos sino amigo, estas bien jodido.

Fotografía: Mario Monforte

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